El chamamé es un género musical bailable del folclore de Argentina, correspondiente a la música litoraleña. Es una danza alegre y animada, que trasciende la música y se convierte en una expresión personal y colectiva.
En Argentina es escuchado en las provincias de Corrientes, Entre Ríos, centro-este de Formosa, Santa Fe, Chaco, y en toda la provincia de Misiones, región denominada Litoral argentino, donde es la música más popular. También es escuchado en el norte santiagueño. A su vez, es escuchado en Bolivia, Paraguay, sur de Brasil, parte de Uruguay y sur de Chile.
La danza puede tener un ritmo alegre y animado, o, por el contrario, ser triste y alegórica, por lo que existen varios tipos de Chamamé, que reflejan a su vez diversos estados emocionales o circunstanciales de sus cultores, entre ellos se encuentran:
Chamamé orillero: es en el que se notan influencias del tango. Tal hecho ocurre en las periferias de las ciudades del ámbito guaraní.
Chamamé ganci o chamamé triste: es una modalidad del chamamé y se caracteriza por su tónica, también se lo denomina chamamé canción.
Chamamé maceta: de pulso y ritmo más vivos y habituales en los grupos que tocan en festivales y bailes «boliches».
Chamamé caté: es más elegante y en lengua guaraní.
Chamamé rory: de ritmo alegre y contenido humorístico. Antiguamente no era valorado, su primer representante fue Mario Millan Medina. En la actualidad tiene cultores reconocidos como por ejemplo el Trío Laurel.